
La traductora de El Eternauta explicó por qué puso "Malvinas Islands" y no "Falklands" en los subtítulos en inglés
La serie estrenada en Netflix
"Sé que ningún argentino, sea real o ficcional, las llamaría de otro modo”, argumentó.
Más de uno se sorprendió gratamente al ver que en la serie El Eternauta los subtítulos en inglés dicen "Malvinas Islands" y no "Falklands", que es como el Reino Unido llama a las Islas Malvinas. Y fue la propia traductora que trabajó en el subtitulado la que salió a explicar el porqué de esa decisión. "Era la única opción viable, no tuve la menor duda", aseguró.
Daiana Estefanía López afrontó probablemente uno de los mayores retos en su carrera como traductora: hacer el subtitulado en inglés de El Eternauta, una historia que marcó a varias generaciones argentinas. El guion de la serie hace referencia, por ejemplo, a las Islas Malvinas, que para nuestro país son mucho más que geografía. Son patria, pero también memoria y, cómo no, también son dolor.
“Apenas empecé a trabajar en la traducción al inglés de la serie El Eternauta y vi que Juan Salvo era excombatiente de Malvinas, decidí que iba a traducir 'Islas Malvinas' como 'Malvinas Islands' y no como 'Falklands'. Era la única opción viable, no tuve la menor duda. No solo porque jamás se me ocurriría usar en ese contexto y en una producción argentina un nombre que no sea Malvinas, sino que además porque sé que ningún argentino, sea real o ficcional, las llamaría de otro modo”, comenzó el mensaje de López en sus redes sociales.

“Cuento este detalle y pienso que tal vez puede resultar algo obvio, pero no podemos dar las cosas por sentado ni dejar nada librado al azar, en especial cuando se trata de un proyecto de alcance mundial que se difunde en una plataforma tan conocida. Es así que, como traductora que además ofició de enciclopedia argentina para los otros traductores de este proyecto, sugerí que en los subtítulos de todos los idiomas se usara el nombre Malvinas, independientemente de si en esos países llaman así a nuestras islas o no”, continúa la publicación.
Efectivamente, los subtítulos o doblajes en checo, italiano, danés y japonés, entre otros, utilizan el nombre Malvinas. "Es un tema sensible y muy presente que nos atraviesa en el ámbito político, histórico, cultural y social... Nos asienta en un lado de la historia del que no nos vamos a mover", destaca la traductora.
"No se trata de caprichos personales ni de intransigencias, sino de buscar transmitir de manera fiel, auténtica y profesional la esencia y la idiosincrasia de estos personajes en el contexto de la obra y nuestro país, más allá de las fronteras idiomáticas. Y confiar en que al público le va a gustar aprender algo más sobre nuestra cultura, nuestra historia y nuestra forma de ver el mundo”, sentenció su mensaje.

El Gobierno y Malvinas
La agenda ultraconservadora del Gobierno de Javier Milei y sus constantes ataques a países que solían ser aliados en la causa Malvinas y votar a favor de Argentina en la ONU, han provocado que esas naciones disminuyan su nivel de apoyo. Por ejemplo, por primera vez desde su creación, la Comunidad de Estados Latinoamericanos y Caribeños (CELAC) no apoyó como grupo regional a la Argentina. Lo mismo sucedió con el Mercosur.
En febrero de 2024, tras reunirse con Milei en el FMI, el entonces secretario de Estado para Asuntos Exteriores británico, David Cameron, viajó a las Islas Malvinas y aseguró que "serán británicas para siempre". Fue la primera visita de una figura política relevante de la diplomacia británica en los últimos 30 años. Milei definió al encuentro con Cameron como "excelente y cordial" y el Gobierno no emitió ni un comunicado en repudio de su presencia en las Islas.
En marzo, tan solo un mes después, el Reino Unido decidió de forma unilateral extender su control sobre zonas marítimas de las Islas Malvinas, en las que prohibieron la navegación y la pesca. Se trata de 166 mil km2 que se sumaron a los 283 mil km2 sobre los que ya regía la exclusión, luego de que en 2012 las autoridades británicas forzaran la creación de un Área Marítima Protegida (AMP).

En octubre, la propia Cancillería emitió un comunicado en el que llamaba "Falklands" a las Islas Malvinas. Mondino dijo que el comunicado "era falso", aunque luego se desdijo al calificarlo como "una versión maliciosa" y, al igual que Milei, acusó a "la ideología de izquierda".
Uno de los últimos episodios se dio justamente el pasado 2 de abril. En un acto cerrado realizado en la Plaza San Martín del barrio de Retiro, en la Ciudad de Buenos Aires, al que no pudieron acceder cientos de excombatientes, Javier Milei se animó a desear que los "malvinenses quieran votarnos y ser argentinos”, a contramano de la histórica estrategia diplomática del Estado argentino.
"Anhelamos que los malvinenses decidan algún día votarnos con los pies a nosotros. Por eso buscamos ser una potencia, a punto tal que ellos prefieran ser argentinos, que no haga falta usar la disuasión o el convencimiento para lograrlo”, sostuvo Milei, avalando la autodeterminación de los kelpers. El Presidente en ningún momento condenó la presencia británica ni se refirió al invasor como tal.
La última fue la del Correo Argentino. Denominó “Falkland Islands” a las Islas Malvinas en un mapa interactivo a las islas que Gran Bretaña usurpa desde 1833.

El jefe de Estado dijo en varias ocasiones que se sentía "identificado" con Margaret Thatcher, quien para él es una referencia política. "La señora Tatcher fue una gran líder" llegó a decir en el debate presidencial de 2023. Incluso trazó una comparación con Mbappé, a quien, según él, no deberíamos odiar solo "porque nos clavó 3 goles".
Como si un futbolista que le mete goles a la selección argentina fuera lo mismo que la primera ministra del Reino Unido que ordenó el hundimiento del Crucero ARA General Belgrano. La nave se encontraba fuera de la zona de combate, motivo por el cual esa acción se considera un crimen de guerra. Fueron 323 los jóvenes argentinos que murieron allí, en aguas profundas y frías.
Fuente: Página12